Testimonio  (1965)

CANTO AL PADRE JUAN DE VELASCO

¡Padre Velasco!
arquitecto dieciochesco,
en la catedral de tu Historia Patria
guárdense reliquias de una edad estelar y heroica.

Ilustre jardinero
de un jardín lejano y anecdótico.

¿Quién sino tú
salvó del vendaval del tiempo
nuestros lirios coloniales?

Sublime ocioso
en la inspiradora Faenza.

Astro proscrito, lirida autóctono.
Espuma exquisita
de sempiternos ríos.
Rumor en fusión étnica.
Imagen precursora
de la tierra americana.
Policromía del espíritu.
Elevación de la raza.

¡Padre Velasco! Santo padre:
porque en ti
la poesía se hizo historia,
y la historia, poesía.
Con el alma sin encajes
la epopeya yo saludo,
y la cumbre de tu fama
deshielo este poema

1965